Páginas

domingo, 20 de septiembre de 2015

La peor selección del planeta quiere dejar de serlo

Los títulos sirven para premiar a los triunfadores y reconocer su victoria. Pocas veces un equipo perdedor adquiere tanto protagonismo como para aparecer en el libro de los récords y hacer que un documental, 'Next Goal Wins', gire sobre las consecuencias de la derrota.

El partido disputado el 11 de abril de 2001 en Coffs Harbour entre Australia y Samoa Americana, valedero para la fase de clasificación del Mundial 2002 de Japón y Corea del Sur, será siempre recordado por varios motivos. Un encuentro que motivó que a Samoa Americana se la considerara la peor selección del mundo.

Samoa Americana, Samoa oriental

Las dos Samoas, cerca en el espacio y lejos en el tiempo
Samoa y Samoa Americana son territorios de Oceanía que comparten nombre y cercanía física. Dos  pequeñas superficies de tierra que se encuentran rodeadas en la inmensidad del océano Pacífico, a mitad de camino de Australia y América, en las antípodas de España, y a las que la historia y el tiempo los ha terminado por separar.


La población de todos los archipiélagos apenas supera las 200.000 personas, tienen como idiomas oficiales el samoano y el inglés. Las islas fueron repartidas tras el Tratado de Berlín de 1899. Alemania ocupó Samoa occidental, después lo haría Nueva Zelanda, mientras que los Estados Unidos tomaron el control de Samoa oriental, renombrándola a Samoa Americana, cuyos ciudadanos en la actualidad no son considerados estadounidenses, a pesar de que sea reconocido como territorio no ocupado y que muchos de sus habitantes terminen formando parte del ejército de EE.UU.

Otra particularidad es que están enclavadas en el extremo de los husos horarios, en el de la línea internacional del cambio de fecha, partiendo a ambas Samoas, cuya distancia de 50 kilómetros es mayor, por lo tanto, si se mide en días, horas y minutos.


Dados los vínculos económicos de Samoa con Nueva Zelanda y Australia se sacrificó en 2011 incluso un día en el calendario, el 30 de diciembre, para estar al mismo ritmo que las dos potencias oceánicas. Esta medida los hizo situarse con un horario UTC+13, mientras que los samoamericanos se enmarcan en el UTC-11, al otro lado de la barrera imaginaria del planeta que separa un día de otro.

Es decir, en el momento en el que en España den las campanadas del próximo 1 enero de 2016, en Apia (Samoa) será también el 1 de enero, pero a las 13 horas. Mientras que a 50 kilómetros al este, en la isla de enfrente, en Pago Pago (Samoa Americana), todavía estarán a 31 de diciembre, a las 12 horas.


El deporte en las dos Samoas
No solo el reloj distancia a las islas. El deporte también los diferencia. Mientras que en Samoa se practica principalmente el rugby, en especial el rugby con 7 jugadores, en la Samoa Americana la influencia estadounidense es más palpable, con el fútbol americano como bandera.

En lo que coinciden ambos es en su mal papel en el fútbol. Los dos se encuentran ahora mismo en el ránking FIFA -con 208 participantes- en el puesto 196 para Samoa y 199 para Samoa Americana. Si bien, el partido de 2001 ante Australia colocó a los samoamericanos en todos los titulares de prensa con el cartel de "la peor selección del mundo".

La clasificación en Oceanía para el Mundial 2002
La fase preliminar que se disputó en Oceanía durante 2001 para buscar una plaza para la Copa del Mundo que se celebraría en Corea del Sur y Japón tenía a dos grandes favoritos que estaban situados en grupos distintos: Australia y Nueva Zelanda.

Los 'socceroos' encontraron en Fiyi el único rival por hacerse con el liderato en un extraño formato de liguilla con cinco equipos, pero solo cuatro jornadas, que se disputaron en apenas diez días. El espectacular marcador de Australia ante Tonga por 22-0 se quedó corto con la segunda fecha de este preliminar, en el encuentro ante Samoa Americana.

Australia, soccer, socceroos, football,
La inexperta selección samoamericana caía por 31-0 ante Australia con 13 goles de Archie Thompson. Dos marcas mundiales, difíciles de igualar, se pulverizaban en apenas 90 minutos. El delantero australiano, curiosamente nacido en la vecina Nueva Zelanda y casi desconocido para el gran público, superaba al danés Sophus Nielsen, quien había dejado el registro en una decena.

La derrota fue de tal magnitud que hasta los encargados del marcador, y algunos periodistas, perdieron la cuenta de los tantos australianos.


A pesar de la demoledora imagen del equipo verdeamarillo y de su cómodo paseo en el grupo, solo inquietado por el ajustado 0-2 frente a Fiyi, su billete al Mundial seguía dependiendo de superar el cruce ante Nueva Zelanda y luego tratar de derrotar al quinto clasificado por el cuadro sudamericano, en el temido repechaje intercontinental.

Australia disputó un doble enfrentamiento ante Uruguay donde la ilusionante victoria en Melbourne por 1-0 se desvanecía con el 3-0 encajado en Montevideo, en otra repesca perdida para los australianos

Australia,

Aquella derrota ante Uruguay recuperó la vieja idea de la Federación Australiana de abandonar la fase de clasificación por Oceanía, donde las goleadas no aportaban y el billete al Mundial estaba caro, para pasar a Asia, donde cuatro plazas se adjudicaban de manera directa. Decisión tomada definitivamente en 2005 y ejecutada oficialmente a partir de 2006.

La fe de Samoa Americana
Si algo caracteriza a la isla de Samoa es su inquebrantable fe religiosa y la capacidad de superación que ha tenido siempre la comunidad ante los desastres naturales. Y como si fuera de otro tsunami, la humillante derrota frente a Australia, que nada sirvió a los 'aussies' en su camino hacia el Mundial, motivó que la considerada como "peor selección del mundo" buscara una solución ante la adversidad.

Nicky Salapu, el portero que sufrió la gran derrota, volvió desde Seattle para preparar los juegos del Pacífico Sur, en un intento de cicatrizar una herida deportiva que le había marcado y a petición de Thomas Ronge, el nuevo técnico holandés que ocupaba el banquillo, quien llegó cuando la federación samoana pidió ayuda a la federación estadounidense de fútbol y como catarsis personal ante la pérdida en accidente de circulación de su hija adolescente.

El estilo estricto de trabajo del tulipán mejoró la profesionalidad del equipo, además de localizar a otros jugadores seleccionables como Rawlston Masaniai, nacido en EE.UU. pero con abuelos samoanos, y contar con Ramin Ott, sargento del ejército norteamericano, el cual pidió permiso durante un año para participar en la fase clasificatoria con su servicio al equipo samoano.

Samoa Americana, American Samoa,

Ott anotó el primer gol del equipo, de penalti, a las Islas Salomón en 2007. Una derrota por 12-1 endulzada con este estreno anotador de la selección polinesia en cualquier competición oficial de carácter internacional.

La clasificación en Oceanía para el Mundial 2014
Hubo que esperar cuatro años más, el 23 de noviembre de 2011, para cantar la siguiente diana de Ott, de potente chut desde 35 metros que abrió el camino al primer triunfo del combinado nacional en toda su historia en el 2-1 ante Tonga. Esta histórica victoria, disputada en la vecina Samoa ante solo 150 espectadores, contó con la presencia en Samoa Americana tanto de Salapu en la portería, único superviviente del 31-0, y del defensor Johnny Saelua, el primer transexual que ha disputado un encuentro oficial, algo muy común el la cultura samoana, donde es considerado como un tercer sexo, quien salvó un gol cantado bajo el larguero en el último suspiro.

El posterior empate ante las Islas Cook, dentro de estas preliminares de clasificación para el Mundial 2014, hizo del derbi entre Samoa y Samoa Americana un choque decisivo para dilucidar cuál equipo pasaba a la fase definitiva para acudir a Brasil por Oceanía. El 1-0 en contra, que llegó justo después de que Diamond Ott estrellara el balón en la cepa del poste, lejos de romper el sueño de la victoria, demostró que la pesadilla de la derrota ante Australia había sido enterrada por los guerreros samoanos americanos.

En este mes de septiembre, Samoa occidental ha encadenado dos triunfos consecutivos -frente a Tonga, de nuevo, e Islas Cook-. Una racha que hace olvidar en parte el cartel de peor selección del planeta porque, en julio de 2015, Vanatu superó la plusmarca australiana en su duelo, en categoría sub-23, ante Micronesia, pero este 46-0 no se registra por no pertenecer esta última la FIFA, lo que hace que Samoa Americana siga siendo la selección que ha recibido la mayor derrota del fútbol de selecciones, aunque hace tiempo que haya dejado de ser la peor selección del mundo.

4 comentarios:

  1. Lo del pase de Australia a Asia, considerar a Australia como parte de Asia sólo lo hizo antes el Japón Imperial, no tuvo otro motivo que promocionar al fútbol por delante del Rugby en Nueva Zelanda, sobre la base de que jugando mundiales tal vez consiguiesen convertir al fútbol en el primer deporte de Nueva Zelanda. Yo sinceramente estas cosas no me las tomo en serio, porque no lo son, como tampoco lo es que Gibraltar tenga selección. Pero en fin.. por eso hace mucho que paso del fútbol de selecciones.

    Fdo Gonzalo

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. La verdad es que lo van a tener difícil para lograr que Nueva Zelanda deje de tener al fútbol como deporte rey.

      Eliminar
  2. Cada vez que leo algo de lo que escribes sobre fútbol me quedo con la boca abierta.elisa

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Gracias, Elisa.
      Reconforta saber que la familia está detrás apoyándome con el blog. :-)

      Eliminar