miércoles, 24 de julio de 2013

Historia de los Mundiales: Sudáfrica 2010

Máximo goleador: Thomas Müller (Alemania), 5 goles. Junto a él, con el mismo numero de tantos estaban: Diego Forlán (Uruguay), Wesley Sneijder (Países Bajos) y David Villa (España). El premio recayó sobre el germano por haber sido el máximo asistente de los cuatro futbolistas -tres pases de gol en el torneo-.

Sedes: Bloemfontein, Ciudad del Cabo, Durban, Nelspruit, Polokwane, Puerto Elizabeth, Pretoria, Rustenburg y Johannesburgo, que contaba con dos estadios: Ellis Park y Soccer City.
    
Número de goles (media por partido): 145 en 64 partidos (2,27 de promedio)

Partidos disputados: 64
Número de espectadores (media por encuentro): 3.179.486 (49.679 por partido)

Participantes: 32
(África, 6) Argelia, Camerún, Costa de Marfil, Ghana, Nigeria y Sudáfrica.
(América, 8) EE.UU, México y Honduras. (Sur) Argentina, Brasil, Chile, Paraguay y Uruguay.
(Oceanía, 2) Australia y Nueva Zelanda.
(Asia, 3) Corea del Norte, Corea del Sur y Japón.
(Europa, 13) Alemania, Dinamarca, Eslovaquia, Eslovenia, España, Francia, Grecia, Inglaterra, Italia, Países Bajos, Portugal, Serbia y Suiza.

Final: 11-Julio-2010, Johannesburgo. España 0-0 (1-0) Países Bajos (prórroga).

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La FIFA estaba dispuesta a que la edición de 2010 tuviera un marcado carácter más universal con la celebración del torneo en suelo africano por primera vez. Egipto, Marruecos y Sudáfrica fueron los candidatos para albergar la XIX cita mundialística. Finalmente, el premio recayó sobre los sudafricanos cumpliendo el sueño deportivo del dirigente local Nelson Mandela.

La globalización también llegaba con el número de participantes al evento, 204 de las 208 federaciones inscritas en la FIFA iniciaban su andadura hacia la consecución de Copa del Mundo en las fases continentales. Como ya había ocurrido en el anterior Mundial, sólo el anfitrión tenía garantizado su billete. El vigente defensor del título, Italia, entró a través del grupo octavo europeo.

Sudáfrica
El balón
Sudáfrica tiene 11 lenguas oficiales. Una apertura lingüística ofrecida tras el final del Apartheid -segregación racial vivida en el país durante el siglo XX-. Como homenaje a una de las etnias más representativas en la nación y a su idioma se bautizó el balón como Jabulani, que en zulú significa celebrar, y que no paró de recibir críticas, a pesar de su optimista nombre.

Adidas repitió como fabricante con un diseño colorido formado por 11 tonos debido al número de jugadores de un equipo de fútbol y a la cifra de idiomas usados en Sudáfrica. La volatilidad y dificultad del Jabulani para ser atajado por los porteros fue el principal lastre de quejas.

Jabulani, Adidas, 2010
La mascota
El comité del Mundial eligió un leopardo como mascota, denominado Zakumi. Una palabra compuesta por los términos 'za', que es el código identificativo del país, y 'kumi' que es traducido como diez en la mayoría de lenguas de la región. El felino encajaba como animal típico de Sudáfrica y se le dio un toque más nacional con el amarillo y verde, colores representativos de las selecciones sudafricanas.

Zakumi, mascota Sudáfrica 2010

Por encima de la mascota, todos los aficionados al fútbol relacionan esta edición africana con la vuvuzela. Una sonora y colorida trompeta utilizada en las gradas que ya había hecho su presentación oficial en la Copa Confederaciones del año anterior, donde Brasil remontó a Estados Unidos en la final (3-2). 

Grandes ausencias y novedades
Sudáfrica 2010 supuso el regreso a la máxima competición de combinados como Chile, Grecia, Argelia, Honduras, Corea del Norte y Nueva Zelanda, quien se benefició de la decisión de Australia de abandonar la confederación oceánica para jugar como equipo asiático, dado que Oceanía no tiene plaza fija -están condenados a la repesca- mientras que Asia dispone de cuatro puestos directos, más uno adicional, para acceder a los Mundiales.

Otras dos selecciones que se estrenaban bajo su nueva denominación eran Serbia y Eslovaquia. La primera, tras haber sido representada como Yugoslavia y después como Serbia y Montenegro. Eslovaquia había surgido de la división de Checoslovaquia en 1993.
Eslovaquia, bandera eslovaca

Entre las ausencias más notables estaban: Suecia, República Checa, Croacia y Rusia. La polémica estuvo situada en la eliminatoria de repesca del Francia - República de Irlanda. Los galos conseguían la clasificación en la prórroga, del encuentro de vuelta, merced a unas manos no pitadas de Henry que facilitaban el control para el tanto 'bleu' de Gallas.

En el lado sudamericano, Ecuador, Venezuela y Colombia mantuvieron una preciosa pelea con Uruguay por el quinto puesto de la fase continental que daba derecho a jugar el repechaje. Los charrúas fueron los afortunados con la plaza y salieron victoriosos de su cruce ante Costa Rica.

Dejan Stankovic, triplemente internacional
No son muchos los jugadores que han defendido a distintas selecciones, entre ellos podemos encontrar a estrellas como Kubala, Puskás, Schiaffino o Di Stéfano, por ejemplo. Una situación a la que se llegaba por motivos políticos o apoyados en sus dobles nacionalidades en una etapa de cierta laxitud y vacío legal en los organismos internacionales que permitían estos cambios.

Sin embargo, el caso de Dejan Stankovic, nacido en 1978 en Belgrado, es singular. Stankovic disputó tres Copas del Mundo bajo tres federaciones diferentes. En 1998, defendiendo a Yugoslavia, en 2006 a Serbia y Montenegro para jugar con Serbia en 2010. Todo ello por motivos ajenos a su voluntad, obligado por las circunstancias políticas que se produjeron en los Balcanes en las últimas décadas.

Primera fase (ronda de grupos)
Se compuso de ocho grupos, con cuatro selecciones cada uno, de los que se clasificaban dos países para octavos de final. Es decir, el habitual formato de la competición desde que existen 32 participantes. El Mundial volvía a abrirlo el anfitrión con el encuentro inaugural.

Grupo A
Raymond DomenechFrancia sufrió un calvario en esta Copa. La mayúscula decepción deportiva, sólo un punto y un gol en tres encuentros, eran el reflejo del divorcio entre la plantilla y el técnico Raymond Domenech, que incluso terminó con la expulsión de Nicolas Anelka de la concentración por insultar al entrenador. 

Sudáfrica se convertía en el primer organizador de la historia que no pasaba de la primera ronda aunque se daba el placer personal de doblegar a los 'bleus' por 2-1.

Uruguay y México, con grandes jugadores jóvenes en sus planteles, avanzaban hacia octavos de final con más comodidad de la inicialmente prevista en un grupo donde Francia se antojaba, a priori, el rival más fuerte.

Grupo B
Argentina partía como favorita y cumplió su papel con tres triunfos, incluyendo un hat-trick de Gonzalo Higuaín. Las dudas recaían sobre el acompañante de la albiceleste para octavos, un puesto al que aspiraban tanto Corea del Sur, Nigeria y Grecia.  Finalmente, fueron los asiáticos quienes consiguieron su billete merced a los 6 puntos sumados.

Grupo C
Inglaterra, eterna aspirante, hacía esperar hasta la última jornada para confirmar su segundo plaza. El grave error del guardameta Robert Green ante los estadounidenses, quienes acabaron primeros, lastró la confianza en la portería de los 'pross'. Eslovenia tuvo en sus manos arrebatar el pasaporte a octavos a los ingleses con un decisivo último partido entre ambas selecciones que se decidió con un solitario tanto de Defoe.

Grupo D
Asamoah Gyan, GhanaLa tercera jornada del grupo D desenredó la madeja. El inesperado triunfo de Serbia sobre Alemania y el empate de Australia frente a Ghana abrieron las opciones a los cuatro conjuntos. El guión se cumplió y fueron los teutones y los ghaneses pasaban de fase. Los africanos se convertían en el único representante africano en octavos con unos pobres números de sólo dos goles a favor, ambos de penalti, a cargo de Gyan.

Grupo E
Otro de los firmes candidatos del continente negro, Camerún, topó con la enésima anarquía de los 'leones indomables'. Las siempre difíciles relaciones en el combinado camerunés, que contaban con Eto'o, Emana, Song o Kameni, empeoraron con los resultados que colocaron a los africanos en la cola de la tabla. Dinamarca y Japón lucharon por el segundo puesto en un partido decantado del lado nipón, mientras que los Países Bajos hicieron pleno de triunfos.

Grupo F
Si Francia fue considerado un descalabro, para Italia se agotaban los calificativos. Los dos últimos finalistas de la Copa del Mundo -Italia y Francia- se despedían en la primera ronda, un hecho insólito en los Mundiales.

La 'azzurra', plagada de estrellas como Buffon o Pirlo, empató sorpresivamente con Nueva Zelanda y Paraguay, quienes con 5 puntos terminaron comandando el grupo. Cuando parecía que el tropiezo se podía arreglar, la tetracampeona desechaba sus opciones en un intenso choque ante la debutante Eslovaquia que rompía pronósticos y alcanzaba la segunda ronda.

Grupo G
Costa de Marfil no tenía tanta presión por la calificación. Aunque el nivel futbolístico de los 'elefantes' era bueno, gracias a los Drogba, Keita, Touré, Kalou, Gervinho o Eboué, compartir viaje con Brasil y Portugal se intuía como una empresa complicada, como terminó ocurriendo.

Los lusos se dieron un festín ante Corea del Norte -en la reedición del partido que remontó Eusebio en 1966- con un histórico 7-0 en el que marcaron siete jugadores distintos y que permitió acceder a octavos con Brasil, cuyas sensaciones no acababan de ser buenas.

Grupo H
Pocos podían imaginar que la derrota de España ante Suiza iba a ser el anticipo del mayor éxito del fútbol hispano. El triunfo de la selección en la Eurocopa de 2008 había revitalizado la habitual euforia de la prensa nacional y de los aficionados de cara a un torneo continental. Las posteriores victorias ante Honduras y Chile, con gran esfuerzo, colocaron a los hombres de Vicente Del Bosque como cabezas de grupo, seguidos de la 'Roja' dirigida por Marcelo Bielsa.

Ghana, escudo federación

Octavos de final
Uruguay 2-1 Corea Del Sur
La 'celeste' tenía pista libre por la parte del cuadro donde estaba situada, dando la oportunidad al equipo de Tabárez de recuperar su lugar en la Copa del Mundo. Una ocasión que no desaprovecharon. A pesar del planteamiento ofensivo, gracias al tridente formado por Cavani, Forlán y Suárez, los charrúas sufrieron más de lo previsto ante los surcoreanos. A falta de 10 minutos, Suárez repetía como goleador con un remate ajustado al segundo palo que dibujaba una mortal curva imposible para el meta asiático.

Estados Unidos 1-1 (1-2) Ghana
El conjunto africano se mantenía vivo en el torneo tras un disputado choque de octavos. Abrió el marcador Kevin Prince Boateng, cuyo hermanastro Jereme también participaba como internacional en la selección alemana. El empate corrió a cargo de Landon Donovan, desde los once metros, para que Gyan decidiera la eliminatoria en la prórroga adelantándose a los centrales 'yankees'. 



Alemania 4-1 Inglaterra
Es uno de los duelos clásicos del fútbol mundial y de los de mayor rivalidad. A pesar del abultado resultado definitivo, el equipo de Fabio Capello tuvo sus opciones en el partido. Dos tempraneros tantos alemanes, antes de la media hora de juego, recibieron una rápida respuesta: primero en el cabezazo del defensor del West Ham Matthew Upson, justo del mismo club al que pertenecía Hurst -el goleador de la final de 1966- y a continuación con un posterior gol fantasma que no subió al marcador.


El mítico encuentro de Wembley volvía a la memoria colectiva cuando el chut de Lampard traspasaba la línea tras golpear el larguero, ante la negativa del asistente a concederlo como válido. Justo lo contrario que en la final de 1966. La historia se volvía en contra de los 'pross' en un retorcido ejercicio de justicia poética.

Inglaterra se volcó para conseguir el empate e incluso por dos veces tropezaron en los palos. La 'Mannschaft' consumaba el castigo al contraataque, acabando la faena con sendos goles de Müller. Alemania, perpetua candidata al título, revalidaba su condición de favorito mientras la prometedora Inglaterra de los Lampard, Gerrard, Rooney, Cole o Terry añadía un nuevo fiasco a su colección de descalabros en torneos internacionales.

Argentina 3-1 México
La albiceleste repetía como verdugo de los aztecas, tal y como sucedió en 2006. La pegada de Argentina en la cita de Sudáfrica era temible. La renta cosechada por el doblete de Tévez e Higuaín fue una losa para los mexicanos, cuya mezcla de veteranos -Cuauhtémoc Blanco, Salcido, Torrado o Rafael Márquez- y noveles -Andrés Guardado, Carlos Vela, Chicharito Hernández y Giovani dos Santos- merecían haber llegado más lejos en el campeonato.

Países Bajos 2-1 Eslovaquia
La 'Naranja Mecánica' era uno de los tapados del Mundial. Paso a paso iban superando obstáculos y rondas. En octavos se toparon con la 'cenicienta' Eslovaquia que plantó batalla con un equipo en el que destacaban el central Skrtel, Weiss y el 'napolitano' Hamsik. Los tulipanes se basaban en la habilidad de Robben, con su patrón de jugada tan sabido por todos y tan difícil de frenar, el olfato goleador de Kuyt y Van Persie junto a la llegada en segunda línea de Sneijder.
Países Bajos 2010, Sudáfrica
Brasil 3-0 Chile
La fe depositada en la 'Roja' de Marcelo Bielsa se evaporó en el choque ante su némesis histórico: Brasil. El trabajo del técnico argentino con Chile había dado buenos frutos y mejorado el talento de la hornada de Claudio Bravo, Isla, Contreras, Carmona, Alexis Sánchez, Vidal, Suazo, Jara, Medel, Valdivia, Mati Fernñandez, Orellana... pero en Sudáfrica no fue suficiente para avanzar. La 'canarinha' superó el envite con las firmas de Juan, Luis Fabiano y Robinho.

Paraguay 0-0 (5-3) Japón  
Ni guaraníes ni nipones habían llegado nunca a cuartos. El miedo a lo desconocido imprimió un ritmo reservón en el que sólo los tímidos remates de Santa Cruz, Honda, Valdez y Lucas Barrios quisieron impedir la inminente prórroga. La perfecta tanda de penaltis de la albirroja,  repóquer de aciertos, era culminada con el lanzamiento del especialista Óscar Cardozo, para Japón había errado Komano.

España 1-0 Portugal
El siempre equilibrado duelo ibérico se resolvió con un tanto de David Villa, tras recoger un rechace de un disparo realizado por el propio jugador asturiano. La Portugal de Cristiano Ronaldo había elegido afrontar el partido cediendo el balón a España, que hasta el gol había dispuesto de diversas ocasiones de anotar y que encontró en Fernando Llorente el revulsivo para fijar a la defensa lusa.
Portugal, Sudáfrica 2010
Cuartos de final
Países Bajos 2-1 Brasil
Los peores pronósticos para la 'canarinha' se cumplieron en cuartos de final. Robinho anotaba pronto, a los 10', en un balón en profundidad de Felipe Melo que perforaba a los centrales holandeses. Toda parecía de cara para los pentacampeones pero la zozobra de los brasileños y el magnífico estado de forma de la dupla formada por Robben y Sneijder, partícipe en sendos goles, obraron la remontada ante una 'verdeamarela' asustada y cabizbaja que volvía a despedirse antes de tiempo.

Uruguay 1-1 Ghana
Fue uno de los partidos más emocionantes del Mundial 2010. El primer tiempo tuvo muchas alternativas y lo cerró Muntari con un disparo lejano que sorprendía a Muslera. La réplica no tardó en llegar con un lanzamiento de falta de Forlán, de golpeo seco, que batía a Kingson. En la prórroga no hubo lugar a la tregua, hasta 40 disparos realizaron ambos equipos en los 120', y justo antes del final se produjo la jugada del partido.

Un libre directo botado desde el flanco derecho provocaba un barullo en el área celeste donde Muslera perdía su posición mientras Suárez salvaba un disparo bajo palos. El posterior cabezazo también era repelido por el delantero charrúa, esta vez con las manos, lo que significaba la expulsión del '9' y el consiguiente penalti que Gyan estrellaba contra el larguero para alegría de los uruguayos.

Gyan, Uruguay-Ghana penalti

La tanda de penaltis fue arrancada con acierto. Forlán, Victorino y Scotti por los 'orientales', mientras Gyan -demostrando una gran personalidad al repetir desde los once metros- y Appiah lo hicieron para los africanos. Mensah abrió el periodo de errores con un débil disparo atajado por Muslera, Pereira mandaba a las nubes las ilusiones charrúas para regresar con otra parada del meta uruguayo. El "loco" Abreu daba sentido a su seudónimo cuando elegía ejecutar a lo 'Panenka' el tiro final decisivo. Uruguay alcanzaba las semifinales con estilo.

Argentina 0-4 Alemania
Por quinta vez consecutiva, desde Italia'90, la albiceleste se quedaba en la cuneta antes de los cruces decisivos y por segunda ocasión era Alemania la encargada de echar al combinado argentino. En esta ocasión, con mayor contundencia. El equipo dirigido por Maradona se mostró individualista y encontró a un rodillo conjuntado que se adelantó enseguida, a los 3', por mediación de Müller.

Las referencias ofensivas de Argentina aparecían por oleadas y siempre en acciones personales. En especial, Di María e Higuaín, ante el ostracismo de Leo Messi. En el segundo tiempo llegaron los tres mazazos definitivos de Friedich y Klose, en dos ocasiones, -quien elevaba su renta a 14 dianas en sus participaciones en las Copas del Mundo, un gol por detrás del brasileño Ronaldo-.

Paraguay 0-1 España
Paraguay ofreció mucha oposición a España. La fuerte defensa guaraní y la ayuda de los mediocentros, impuesta desde el banquillo por el 'Tata' Martino, ahogaron la creatividad española. Además, la 'albirroja' salía rápida al contraataque con la velocidad de Valdez y Cardozo ante un equipo español que se sentía desactivado. Los nubarrones de los cuartos de final amenazaban con tormenta para los pupilos de Vicente del Bosque cuando el árbitro decretaba una pena máxima contra España.

Cardozo lanzaba e Iker Casillas amarraba, adivinando el lanzamiento. Al siguiente minuto el colegiado volvía a decretar penalti en el área paraguaya y Xabi Alonso anotaba, todo era un cruel espejismo porque el lanzamiento tenía que ser repetido en un segundo intento que Justo Villar paraba. El encuentro parecía predestinado al empate hasta que una brillante acción de Iniesta servía para asistir a Pedro cuyo remate golpeaba en el palo, el rechace acababa en las botas de David Villa quien volvía a tropezar en el poste por dos ocasiones, recorriendo el balón la línea de gol como un funambulista que evade la red y termina cayendo al vacío. Gol de España.

Semifinales
Uruguay 2-3 Países Bajos
Van Bommel era uno de los baluartes de aquella 'oranje'. Intimidatorio y expeditivo, logrando reducir a la medular uruguaya de manera ruda y contundentemente. La defensa adelantada de los tulipanes y el obligado cambio táctico uruguayo, por la imposibilidad de contar con el sancionado Luis Suárez, restaron dinamita al ataque de los celestes.

Uruguay, Sudáfrica 2010

La primera parte acabó con empate a un gol. El capitán neerlandés Van Bronckhorst conseguía uno de las dianas más bonitas de esta edición con un lejano misil que se colaba por la escuadra. Antes del descanso, un incansable Forlán encontraba la recompensa a uno de sus constantes remates y nivelaba el duelo.

El segundo acto, Sneijder adelantaba a los naranjas -con mucha fortuna y con la posición ilegal de Van Persie obstaculizando la visión de Muslera- y Robben ponía tierra de por medio con un inapelable e inusual testarazo. Uruguay apretaba los dientes y echaba el resto. El tanto de Maximiliano Pereira en el tramo final llegaba tarde para intentar la proeza. A pesar de ello, Uruguay había regresado a la cima del fútbol, un techo que tocaría después con la consecución de la Copa América 2011.

España 1-0 Alemania
La reedición de la Eurocopa 2008 tuvo el mismo desenlace. Dos extraordinarias hornadas de futbolistas se enfrentaban en unas semifinales de un Mundial, un lugar nunca antes visitado por la selección española -ya que su mejor participación, en 1950, fue una fase final de liguilla para decidir el campeón-.

Los teutones estuvieron romos, desconocidos, con sólo cinco disparos en los 90' -dos de ellos a puerta-. Por su parte, los hombres de Vicente del Bosque fueron pacientes y concienzudos, moviendo el cuero alrededor de la meta de Neuer -con Xabi Alonso, Xavi, Iniesta y Busquets tejiendo los hilos- hasta encontrar el premio con un saque de esquina que era culminado con un cabezazo de Carles Puyol. 
escudo de España con estrella de campeona del mundo
Tercer puesto:
Uruguay 2-3 Alemania
Dignísimo y entretenido choque por el bronce que tenía en juego, entre otras cosas, el trono de máximo goleador del torneo. Ambos conjuntos salieron en tromba a perforar el arco contrario. Müller iniciaba la cuenta, Cavani respondía y Forlán se sumaba a la fiesta con una semivolea que era igualada con un testarazo de Jensen. A ocho minutos del pitido final, Khedira se elevaba dentro del área para rematar un balón sin dueño y dejar a la 'Mannschaft' como tercera del campeonato.

El pulpo Paul
Sin duda, Paul fue el inesperado protagonista de Sudáfrica 2010. Este cefalópodo del zoo de Oberhausen (Alemania) había sido utilizado durante la Eurocopa para 'adivinar' el ganador de los partidos, como entretenimiento y publicidad del centro. Los cuidadores colocaban dos urnas con alimentos y el pulpo elegía la que era considerado como vencedor. Sus ocho 'predicciones' durante el torneo fueron cumplidas, aumentando su popularidad y trascendencia mediática.

Pulpo Paul
Final:
España 0-0 (1-0) Países Bajos
La ciudad más poblada de Sudáfrica, Johannesburgo, fue el lugar elegido para acoger la final en el que se decidía el octavo nuevo campeón del Mundo -junto al selecto grupo formado por Brasil, Alemania, Italia, Uruguay, Argentina, Francia e Inglaterra-.

Holanda reincidió en un fútbol más físico, que por momentos rayaba la brusquedad, en especial con las acciones de Van Bommel o De Jong. La 'Naranja Mecánica', de hecho, fue sancionada con una treintena de faltas en aquel encuentro. La explosividad de Robben y Sneijder era suficiente para mantener ocupada a la zaga hispana. que contó con una brillante actuación de Casillas -en especial con dos decisivos manos a manos ante el '11' tulipán-.

España, que vestía aquella noche de azul marino, tuvo más control de balón y repartió las oportunidades entre sus jugadores. Con el punto de mira de David Villa algo desviado, el papel fue asumido por otros hombres como Navas, que salió para acelerar el partido, Sergio Ramos, protagonizando también un rol ofensivo y la presencia de Fábregas desde segunda línea para culminar las asistencias de Andrés Iniesta, cuyo concurso estaba siendo colosal.

La final llegaba a la prórroga, la cual se puso a favor de los españoles con la segunda amonestación de Heitinga, a los 109', quien tuvo que frenar de forma antirreglamentaria otra internada del manchego. Precisamente, el albaceteño pasaba a la historia cuando pocos minutos después, en el 116', voleaba un balón que le había servido Fábregas.

Andrés Iniesta se despojó en la celebración de la camiseta para enseñar el mensaje que tenía guardado. Un emotivo recuerdo al futbolista del Espanyol, rival del Barcelona, Daniel Jarque, quien había perdido la vida en 2009 y con el cual había tenido una fuerte amistad gracias a los años compartidos en las categorías inferiores de la selección española.

Andrés Iniesta, gol Holanda, Dani Jarque

El deporte rey en España era coronado con el máximo galardón, el de campeón del Mundo. Siendo el único vencedor de la historia en conseguirlo tras perder el primer encuentro y el más austero de cara a la puerta contraria -8 goles a favor y 2 en contra-. Holanda sumaba también otro hito, en el plano negativo, al quedarse de nuevo en las puertas de la gloria y firmar su tercera final perdida -1974, 1978 y 2010, dos de ellas en el tiempo extra, la de Argentina 1978 y ésta de 2010.

Sudáfrica 2010
  1. España
  2. Países Bajos
  3. Alemania
  4. Uruguay

lunes, 1 de julio de 2013

El fútbol de Rosario: la lepra, los canallas y Carlovich

El fútbol europeo suele mirar con envidia la capacidad que existe en Sudamérica de vivir con el alma este deporte. En las canchas de ese lado del planeta el balón todavía corre alegre y con un tono más alejado del profesionalismo mientras en las gradas surge una pasión indescriptible por unos colores y un escudo. La admiración de Argentina por el fútbol adquiere un carácter casi místico y encuentra en Rosario un particular santuario de devoción.

Rosario, tercera ciudad argentina
La demografía de Argentina es plenamente urbana con buena parte del territorio rural de la nación completamente despoblado. El área de la provincia de Buenos Aires recoge al 40% de los ciudadanos -que superan los 40 millones de habitantes-, por detrás de la capital se encuentran las provincias de Córdoba y Santa Fe, cuya ciudad más relevante es Rosario.
mapa
Rosario, cuna de la bandera
Rosario está situada a la misma distancia, aproximadamente, de Buenos Aires y de Córdoba, nació en el siglo XVIII como una pequeña aldea que debe su bautismo a la capilla de la Virgen del Rosario. La urbe está situada en el margen del río Paraná, importante nexo de tráfico fluvial entre Argentina, Bolivia, Brasil, Paraguay y Uruguay, con la denominada hidrovía que alcanza los 3.400 Km de longitud.

En la ribera del Paraná, en 1812, el General Belgrano enarboló primera vez ante sus tropas la bandera argentina. Un emblema basado en la escarapela azul celeste y blanca, cuyo motivo de elección todavía está en estudio, aunque el propósito parece ser claro y no era otro que diferenciar sus tropas de las española que lucían el rojo. Este es la razón por la que se conozca a Rosario como cuna de la bandera del país.
bandera de Argentina

Un rosario de grandes futbolistas
El fútbol en Rosario es toda una religión, pura mística. Sus calles han visto nacer a grandes referentes del balompié nacional, entre los que destacan: César Luis Menotti, Marcelo Bielsa, Tomás Felipe Carlovich, Gerardo Martino, Cristian Kily González, Santiago Solari, Lionel Scaloni, Aldo Pedro Poy, César Delgado, Maxi Rodríguez, Cristian Álvarez, Ezequiel Garay, Lionel Messi, Ángel Di María, Éver Banega, Luciano Figueroa, Mateo Musacchio o Mauro Icardi, por citar algunos ejemplos de una ciudad que se desvive por este deporte y que principalmente está representado por dos clubes.

Club Atlético Rosario Central
Rosario CentralSu fundación estuvo vinculada a las pachangas realizadas por los trabajadores del ferrocarril de Rosario a finales del siglo XIX. La influencia anglosajona se plasmaba tanto en el primer nombre del club, Central Argentine Railway Atheltic Club, como en el primer presidente, cuya nacionalidad era escocesa. La nochebuena del año 1889 es considerada oficialmente como fecha de la constitución del club.

Con el tiempo, se amplió la entrada a la asociación a todo el público siendo necesario antes estar vinculado al mundo del tren. Este gesto de apertura facilitó la llegada de jugadores y la castellanización del club, para ser conocido como Club Atlético Rosario Central.

El carácter popular de la entidad se puede observar también en el nombre del estadio, que sirvió como sede para el Mundial de 1978, y que recibe el simpático título de Gigante de Arroyito, denominación del barrio donde está asentado la cancha de Central.

Los colores azul y oro sustituyeron en 1904 a las primeras equipaciones que usaban cuadros rojos y blancos y posteriormente azules y blancos. La institución se la conoce como la Academia y presume por igual tanto de ser el primer equipo fuera de Buenos Aires en ganar un título internacional -la Conmebol de 1995- como de sus 4 trofeos nacionales, haber disfrutado del arte de Mario Kempes o robar el corazón futbolero a Ernesto Ché Guevara. 

Club Atlético Newell's Old Boys
El conjunto rosarino debe su original denominación a Isaac Newell, docente del Colegio Comercial Anglo Argentino, y principal responsable de la práctica del fútbol en la ciudad. Se considera 1903 como la fecha de partida de esta institución estudiantil formada por antiguos alumnos y que homenajeaba su pasado educativo tanto en el nombre como con los tonos rojos y el negros, extraídos del escudo del colegio.

Newell's Old Boys, escudoLos éxitos del club se resumen en 6 campeonatos nacionales y se explican por su extraordinaria política con las divisiones inferiores. En este palmarés han tenido una vital importancia dos ex jugadores de la institución que han colaborado en dejar al equipo campeón desde los banquillos: el 'Tata' Martino y Marcelo Bielsa, nombre con el que se conoce el feudo de Newell's desde 2009.

La prolífica cantera de NOB presume de haber formado a jugadores surgidos de sus equipos juveniles y que posteriormente han tenido un gran papel internacional, como: Gabriel Batistuta, Jorge Valdano, Abel Balbo, Américo Gallego, Gabriel Heinze, Roberto Sensini, Mauricio Pochettino o Lionel Messi. Además, Newell's fue uno de los seis equipos en los que jugó Diego Armando Maradona.


El clásico rosarino
Está catalogado como uno de los clásicos más pasionales del mundo y uno de los más coloridos. El derbi de Rosario es una centenaria rivalidad que pasa por ser la más antigua de Argentina. El primer enfrentamiento data de 1905 para sumar un total de más de 330 partidos, los cuales arrojan una gran igualdad entre ambos conjuntos.

Aunque existen discrepancias al respecto, la historia más romántica sobre el origen de los apodos más habitualmente utilizados para definir a Newell's y Central habla de un encuentro benéfico que se iba a disputar motivado por el Patronato de Leprosos. Los rojinegros acudieron a la llamada de dicha cita pero no así los auriazules, fruto de esta decisión los primeros fueron considerados como 'leprosos' y los otros como 'canallas'. Si bien, existen multitud de teorías al respecto, algunas avalando esta anécdota y otras que ofrecen un sentido alternativo.
clásico rosarino, Newell's contra Rosario Central

La 'palomita' de Aldo Poy
En esta larga lista de clásicos rosarinos destaca el gol logrado por Poy ante NOB, en cancha neutral de River Plate, un 19 de diciembre de 1971 en partido correspondiente a las semifinales del Torneo argentino. El duelo se resolvió con un cabezazo en plancha del bigotudo jugador, denominada 'palomita' en Argentina, que servía para clasificar a Central a la final, donde a la postre lograba el triunfo ante San Lorenzo.

Este primer título de los 'canallas' es más recordado por las semifinales que por el posterior enfrentamiento ante los de Almagro. Es más, se trata del gol más veces celebrado en la historia del fútbol. Cada 19 de diciembre, Poy recrea su acción en cualquier lugar, cualquier país -Chile, España, Estados Unidos, Uruguay o Cuba- siempre rodeado de hinchas quienes reviven la acción.

Palomita de Poy

El gol pasó a la memoria popular e incluso saltó a la literatura a través de la pluma del fallecido escritor y humorista gráfico Roberto Fontanarrosa-


El 'Trinche' Carlovich
Tomás Felipe Carlovich es una de las mayores leyendas de Rosario. Un desconocido para muchos de los seguidores de este deporte que adquiere un carácter icónico en la provincia de Santa Fe y en especial en Rosario. Un mito potenciado por la escasez de imágenes y grabaciones que casi lo convirtieron en fábula, si no llega a ser por la veneración que despertó en aquellos que le vieron jugar y por las referencias en los periódicos de una época donde las hemerotecas eran un bien preciado difícil de conservar.

Carlovich, de procedencia yugoslava, dicen que era el clásico talentoso futbolista de barrio, de gran técnica, con desparpajo y con una zurda repleta de extraordinaria habilidad. Tras esta presentación, lo extraño es comprobar que sólo jugara un par de fechas en la máxima categoría argentina.

La respuesta hay que encontrarla en el propio personaje. Un hombre pausado dado a la tranquilidad, más a la pelota que al esfuerzo físico o a la disciplina. Todo ello hizo que su paso por Rosario Central fuera efímero, de puntillas. Las puertas de los canallas se cerraron para abrir las de otro equipo de la ciudad: Central Córdoba, un club acostumbrado a vivir a la sombra de los dos grandes instituciones rosarinas y que fue el foco de atención durante los 70 y 80 gracias a la magia de Carlovich.
Trinche Carlovich
Carlovich enamoraba en cada actuación de Central Córdoba, como si de un torero de renombre se tratara. Su fama creció arrastrando a legiones de seguidores, entre los que se encontraban Marcelo Bielsa, José Pekerman, César Luis Menotti, Carlos Timoteo Griguol o el propio Diego Armando Maradona. Una peregrinación constante que provocaba situaciones chocantes como que un árbitro decidiera no expulsar a Carlovich para que siguiera dando espectáculo, que el precio variara si participaba el 'Trinche' o que la directiva de un club rival diera el visto bueno a que el rosarino disputara un partido, a pesar de no llevar la acreditación encima para disputarlo. Detalles que engrandecen su figura.

Si Carlovich necesitaba una noche para reivindicarse ante los más escépticos y darse a conocer a toda la nación, escogió la cita idónea cuando la selección Argentina decidió culminar la gira de preparación al Mundial de 1974 con un partido ante un combinado de estrellas rosarinas que había decidido salomónica contar con 5 representantes de Newell's, otros tantos de Rosario Central y otro de Central Córdoba, que obviamente fue Carlovich.

Los rosarinos saltaron aquel otoño para enfrentarse ante la albiceleste apabullando al propio combinado nacional, liderado por Mario Alberto Kempes. El resultado final no ofrecía dudas con un rotundo 3-1 para el equipo de Rosario que contó con un Carlovich excelso al que muchos integrantes de la selección nacional no conocían. Leprosos y canallas se abrazaron, olvidando sus colores, con el pitido final en un día de reivindicación del fútbol del interior del país. Una noche de aplausos para un genio incomprendido que ha pasado como un fantasma por las páginas del fútbol internacional, menos de aquellos que le vieron y disfrutaron de su inconfundible estilo.
Carlovich
Diego Armando Maradona fichó en 1993 por Newell's, una corta estancia que apenas duró cinco partidos, a su llegada a Rosario fue agasajado por un periodista que dijo que era un honor para la ciudad contar con el mejor jugador, a lo que el '10' contestó: "el mejor jugador ya ha jugado en Rosario y es un tal Carlovich”.

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